No me tomes de
boludo. Te sentas ahí, me miras y abrís la boca para decirme lo mismo que escuche
miles de veces. Me mentís, me boludeas en la cara. De vuelta remarcas que soy
especial, que te importo mucho. Te me reis en la cara. Me juras que soy
especial y me queres convencer que vos también lo sos. Tratas de ocultar
bastante mal que te importo un carajo.
Insultas mi
inteligencia con frases y apreciaciones que escuche miles de veces. Como si
fueras la primera persona que conociera, como si otras no me mintieron de la
forma en que lo haces. Como si mis años de vida no estuviera plagada de gente
como vos. Me pelotudeas como si fuera un
niño.
Y me ofreces un
futuro. Que te tenga paciencia porque soy importante para vos. Me boludeas.
Como lo hicieron todos los otros políticos antes que vos. Me pedís paciencia y
esfuerzo mientras te cagas en todos. Pero esta vez no, esta vez creo en el
despertar de la gente. Esta vez no lo vamos a soportar más. Tomame de boludo,
que vamos a ver quién queda en pie.
Lobo Estepario
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